"Martina Antonia"

Se me acaba de olvidar mi nombre (sucede cada vez que tengo que escribir acerca de mí), por lo que tendré que utilizar otro… Martina Antonia. Sí, ese siempre me ha gustado, tiene carácter.

La Martina Antonia vive en Santiago actualmente. Pasó de vivir en una casa a un departamento. Extraña al lechero y a los verduleros que pasaban en caballo, o en un automóvil del año “2” por su villa. Recuerda nostálgicamente como corría para esperar al lechero, aunque hace años ya que toma leche en caja y “descremada”. Su hermano, cuando era todavía un nene (ahora es casi un hombre) no le podía decir “caballero de la leche”, le decía el caballo de la leche. Ella hoy esperó la leche en la puerta de su departamento, obviamente el caballo ni la leche llegaron.

Hoy, y en realidad hace varios días, que se cree artista de cine. En su interior esta la banda sonora de “Gracias por el Chocolate” y de “Amelie” sonando constantemente. Respecto a la primera tiene un pequeño dilema: ¿es la villana o la heroína?, deduce que es la heroína. Ella acaba de decidir que mañana irá a misa. Le hace falta.

La Toña extraña a sus vecinos, aunque los encuentre copuchentos. A uno le robaron el auto y fueron los vecinos los que le dieron a conocer el acontecimiento al papá de la Toña, el se lo contó a la Toña. Sus vecinos deberían trabajar en la radio “El Sembrador”, quizás así esta radio tenga una mayor audiencia. VOX POPULIS.

Acá no se ven las estrellas, el smog lo impide…